No te preocupes si no sabes tu graduación actual exacta y no la tenemos recogida en tu ficha, con la ayuda de un frontofocómetro leeremos la graduación de tus gafas para luego compararla con los resultados obtenidos en tu examen ocular.
La graduación de la vista nos permite conocer la agudeza visual de nuestros pacientes, la nitidez con la que ve los objetos situados a larga, media o corta distancia. En óptica la unidad de medida que se emplea para designar la capacidad de refracción del paciente es la dioptría. A mayor número de dioptrías necesitarás mayor graduación de tu lente.
Las lentes Convergentes (Negativa) son más gruesas por el centro que por el borde y concentran los rayos de luz que las atraviesan en un punto.
Si las lentes son más gruesas por los bordes que por el centro, hacen diverger (separan) los rayos de luz que pasan por ellas, por lo que se conocen como lentes divergentes (Positiva)
Es importante hacer una revisión de manera anual, bien para detectar errores refractivos o prevenir y/o detectar anomalías o patologías. Ya seas usuario de gafas o lentillas o no presentes ningún problema es importante llevar un control regular para asegurarte una visión clara, sana y confortable. En nuestro centro realizamos revisiones completas y extensas realizadas por el oftalmólogo y asistidas por el optometrista para asegurarte un control exhaustivo de tu calidad visual.
Nuestro especialista abrirá tu ficha con tus datos personales e historia médica. Te haremos preguntas relacionadas con tu salud, antecedentes familiares, trabajo y estilo de vida. Es importante que conozcamos bien tus necesidades.
Medimos la presión con un tonómetro de no contacto, instrumento que sopla un poco de aire en cada uno de tus ojos que al rebotar proporciona la medida de la presión intraocular.
Esta prueba es importante, para prevenir la presencia de un glaucoma incipiente.
La lectura de graduación la realizaremos con un autorrefractómetro, este instrumento mide de forma electrónica los posibles defectos de refracción de tus ojos y nos proporciona una lectura aproximada de tu graduación.
No te preocupes si no sabes tu graduación actual exacta y no la tenemos recogida en tu ficha, con la ayuda de un frontofocómetro leeremos la graduación de tus gafas para luego compararla con los resultados obtenidos en tu examen ocular.
A través de lentes con distinta graduación nuestro especialista te pedirá que leas una serie de optotipos para afinar los resultados. Los ojos son independientes y los resultados a menudo difieren uno del otro, por lo que se debe examinar cada ojo por separado antes de examinarlos conjuntamente.
Nuestro especialista irá cambiando las lentes que modificarán la nitidez de tu visión. En función de tus respuestas, cambiará las lentes hasta que veas lo más clara y cómodamente posible.
Con la ayuda de un oftalmoscopio examinaremos la parte posterior del globo ocular, que incluye la retina, los vasos sanguíneos y la entrada del nervio óptico. Con esta prueba importante se detectan cambios que indican la presencia de enfermedades como la diabetes o la hipertensión arterial.
Con la sala a oscuras, el especialista se colocará cerca y proyectará con el oftalmoscopio una luz brillante hacia cada ojo.
Esta prueba es fundamental para los usuarios de lentes de contacto. Mediante una lámpara de hendidura potente microscopio con luz incorporada revisaremos la superficie de los ojos (córnea, iris y pupila) para detectar anomalías o lesiones.
Con el campímetro, proyectaremos aleatoriamente puntos de luz en un fondo negro.
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